Los problemas del aprender sustenta que no hay problema de aprendizaje, solo de comunicación. El maestro enseña con un lenguaje que el cerebro no reconocer, el cerebro tiene patrones naturales de aprendizaje y nuestros maestros nos enseñan de otra forma y los resultados ya todos lo conocemos, la pérdida del amor por el aprender. Muy por el contrario nuestras escuelas estimulan la competitividad y el individualismo dejando de lado los valores, la identidad, la responsabilidad social y el desarrollo de competencias humanas.
Mientras que nuestras fortalezas están como perlas, a la espera de ser descubiertas, las escuelas nos llenan de información como si fuéramos grandes bases de datos, sin comprender que con solo despertar el amor por el aprender, no solo seria fácil asimilar todo el conocimiento necesario, si no también aprenderíamos a generar conocimiento y es allí el desafió de todo maestro y escuela que en realidad están en la búsqueda de desarrollar una cultura de aprendizaje.
Ver como los egresados de nuestras universidades salen a la casa de un trabajo, donde cientos o miles están en la misma condición si poder conseguir un puesto, simplemente por que no lo hay, es entonces cuando nos preguntamos ¿Qué esta fallando? Ninguna escuela involucra en sus enseñanzas, estimulo de las competencias emprendedoras, capacidad creativa y capacidades tecnológicas, hoy muy necesarias en el mundo moderno, donde no solo predomina el pensamiento sistémico, si no que también la cultura tecnológica, que va mas allá de adquirir tecnología, si no de como aprovecharla al máximo.
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